Crea un exfoliante casero de aceite de coco. Una mezcla arenosa que te rasca la piel y te deja como un hombre nuevo. Este producto casero te retira toda la suciedad, las células muertas y te normaliza la superficie de la piel ¿El objetivo? Lucir un cuerpo sexy y totalmente tocable este verano.

¿Que necesitas para hacer este exfoliante casero y milagroso? Aceite de coco, azúcar y un tarro vacío para mezclarlos. El aceite de coco es el Rey de los aceites: Tiene propiedades anti microbianas, anti inflamatorias, te nutre la piel que flipas, le aporta elasticidad y ¡huele a playa! Lo único que NO hace el aceite de coco es rascar y como aquí lo que queremos es rascar toda esa suciedad invisible y pulirte el cuerpo hasta dejarte nuevo, vas a mezclarlo con azúcar. Si… azúcar de toda la vida:

Mezclas los dos ingredientes, te metes a la ducha, mojas el cuerpo con agua caliente y te masajeas el exfoliante por toda la piel del cuello para abajo. Vas a notar como te rasca y tienes que seguir masajeando hasta que ya apenas notas el efecto, luego te enjuagas bien con agua fresca y terminas tu ducha como siempre…